Por Mabel Morales y Yury Riaño
El día 20 de Abril de 2013 nos reunimos con el pintor,
escultor y caricaturista duitamense, el maestro Neil Mauricio Avella González,
quien además maneja las técnicas de la cerámica (que es el barro cocido), la
instalación y el óleo. Iniciamos la primera sesión de nuestra entrevista que se
desarrolló en Culturama, donde Neil dicta clases de pintura.
Nuestra primera impresión al verlo fue memorable, un
hombre con cabellera rizada, abundante, una chaqueta de cuero, un jean, unas
gafas y unas botas puntas de acero. A medida que nos acercábamos a él,
sentíamos muchas emociones encontradas, pero una primaba entre ellas, nervios,
porque no conocíamos su temperamento, ni su forma de ser. Al iniciar la
conversación (ya que la entrevista se tornó agradable; de momento sentimos que estábamos en una
conversación con un amigo de toda la vida), nos percatamos que él era una
persona muy sencilla, agradable, misteriosa e interesante.
En esta primera conversación Neil nos contó su inicio,
su trayectoria artística, sus aspiraciones en el arte, empezó con una pequeña
historia de su primer encuentro con el arte:
“ Una vez yo pinté a mi tía Tulia, yo la dibujé con sus gallinas, con su
entorno, con sus cosas, yo tenía 5 años en ese momento, y a ella le gustó y lo
mandó enmarcar y el día que ella se dispuso a reclamarla, me llevó, cuando
entramos a la vidriera, que se llamaba San Luis, ella me miró y le dijo a los empleados "él es el pintor,
el artista" y eso a mí me hizo sentir importante y me marcó de por vida”.
Neil califica su arte como
un arte muy local, cotidiano, de lo que él ve y vive a diario. Según él, la
diferencia entre un artista y una persona que no lo es, no es mucha, es
prácticamente nula, simplemente el artista tiene la delicadeza, el detalle de
registrar lo que ve y lo que siente.
Neil nunca se imaginó que
llegaría a ser uno de los pintores y escultores más famosos de la ciudad y del
departamento, entre sus obras se encuentran: un Cristo en barro cocido que hizo
para la zona alfarera de Sogamoso, “técnicamente era muy exigente porque eran
dos metros de envergadura, es decir de lado a lado, en arcilla, una sola pieza,
fue muy complicado hacerlo pero fue un gran reto, creo que ya debe de estar haciendo milagros
en este momento”. También ha realizado muchos bustos, mucho retrato
escultórico, de los cuales recuerda en especial el del Maestro Académico por
excelencia Eliecer Silva Célis, fundador del museo arqueológico Suamox; dos
años antes de morir estuvo con él, ese retrato fue develado en el octavo
encuentro de Academias de Historia en un homenaje que se le realizo a él, luego
él fallece, pero quedó la satisfacción de que le habían hecho ese busto. Otro
es el de Carlos Aranguren que se encuentra acá en Duitama y que también es una
buena conmemoración y un buen homenaje a un artista de su talla.
Este primer encuentro, fue
muy agradable, como ya lo dijimos; descubrimos una persona talentosa, con mucho
amor por nuestra ciudad y con todas las cualidades que debe tener un artista,
que según Neil son: sensibilidad frente a la cultura, inteligencia, formación,
pasión, amor a la lectura y una gran disciplina; como él afirmó: “parecería que
ser artista es fácil, pero no lo es, porque entonces todos seriamos artistas”.
Llegado el día Sábado 27 de
ese mismo mes, nos volvimos a encontrar en Culturama, donde Neil nos relató
muchos aspectos, tanto laborales, como personales. Nos enumeró los eventos en
los cuales ha participado: “en Boyacá hay un salón muy importante que es la
ZOCAN. Solamente me la he ganado como ocho veces; y en el festival
internacional de la Cultura tuve la fortuna de ganar en varias oportunidades”.
En el trascurso de las
conversaciones llegamos a una pregunta primordial: ¿Por qué pintas? A lo que él
respondió con mucha sinceridad: “pinto porque es una de las mejores excusas
para no hacer nada, de hacer lo que yo quiero, de tener el pelo largo, entonces
el ser artista el ser pintor, le da a uno, ciertas ventajas sociales que de
otra forma no las podría tener”.
Neil es el vicepresidente de
Corpoarte, la corporación de artistas no gubernamentales de Duitama, su
compañero y cofundador de esta corporación Miguel Mendoza lo califica como uno
de los artistas más rápidos del mundo, ya que en diversas ocasiones ha pintado
cuadros en menos de dos minutos.
Neil dice que lo busca
transmitir con su arte es poesía, o lo que la poesía genera, “emociones,
sensaciones, intimidad, esto es lo que quiero transmitir con mi obra plástica,
además que el arte es una de las formas más valiosas de inmortalizar la
memoria.” Él piensa que no existe pintura actual porque ya no hay maestros a
quien seguir; no hay vanguardias según el Maestro Avella para quien es tan
actual una pintura del maestro Ernesto Cárdenas como una instalación o un
performance.
Al finalizar la entrevista,
Neil nos acompañó hasta la puerta y en el trayecto, él asegura que su esposa y sus 4 hijos son la
razón para levantarse cada día y hacer las cosas bien para sacar adelante a sus
hijos.
Nosotras esperamos que Neil
siga haciendo arte, ya que como el mismo
dijo: “si yo no hubiese sido artista sería una gran pérdida para la
ciudad”, lo cual lo dijo de manera irónica (rasgo de los artistas: la ironía),
pero sabemos que esto sería cierto, porque creemos que él es una digna
representación de nuestra ciudad y de nuestro departamento. Ojala Neil difunda
su arte en la ciudad para que esta valiosa forma de inmortalizar la existencia nunca muera.
A
CONTINUACIÓN OFRECEMOS UN PEQUEÑO GLOSARIO Y ANEXAMOS UNA ENTREVISTA CONCEDIDAD
POR EL MAESTRO NEIL AVELLA:
Neil Avella: Nació
en la ciudad de Duitama Boyacá el 3 de Julio de 1969. Es licenciado en artes
plásticas de la Universidad Pedagógica y Tecnológica de Colombia UPTC. Diplomado en educación tutorial, y en
gestión de cultura. Ha recibido formación complementaria en: Restauración de
cerámicas arqueológicas, curaduría, talleres de color, talleres de escultura
monumental, ilustración de libros, fotografía artística.
Su
gestión y su labor como docente ha dejado huella en el que hacer regional y más
de una docena de premios a nivel departamental y cuatro distinciones a nivel
nacional hacen del maestro Avella uno de los artistas más importantes del
departamento.
1. Ebanistas: El ebanista es una persona que fabrica muebles y
paneles, en madera, compuestos de un armazón de carpintería. El maestro ebanista garantiza las distintas etapas de
fabricación: elección del modelo y la madera, aserrado y soldadura, realización
del ensamblaje, del decorado y el montaje. El ebanista es, sobre todo, un artesano.
2. Instalación: Los artistas de instalaciones por lo general utilizan
directamente el espacio
de exposición, a menudo la obra es transitable por el espectador y éste puede interaccionar
con ella.
3. Carlos Aranguren: Carlos Aranguren, nacido en Pesca
(Boyacá), recibió los primeros ejercicios musicales de su hermano Marco Tulio.
En l974, siendo integrante de la banda de músicos de Duitama, ganó su primer
galardón en el Concurso Departamental de Bandas de Paipa y un año después
obtuvo, como director de la agrupación, el primer puesto en el mismo evento a
nivel nacional. En l981, él y su banda, obtuvieron en Paipa el galardón de
ganador de ganadores, siendo declarados fuera de concurso.
5. Ernesto Cárdenas: Nace
en Duitama, Boyacá - Colombia en 1921. La pintura
del maestro Cárdenas revela originalidad e imaginación en
la representación de las escenas, hace gala de un colorido atractivo
y singular, presenta claras relaciones entre su manera de expresión y el mundo
inocente y lírico que presenta y logra convencer y seducir por la gran
sinceridad que es evidente en su temática y ejecución.
Nuestro artículo se pudo
desarrollar gracias a las 2 entrevistas hechas el 20 y 27 de Abril del presente
año:
Yury-Mabel: ¿Nos podrías
contar un poco acerca de tu historia en el arte?
Neil: Básicamente el arte
empieza a formar parte de mi vida en la primaria, en esa época, uno no hacia ni
kínder, ni pre kínder, sino se entraba a primero, mi mamá me llevó el primer
día de clases y yo me quede llorando, ella me llevó un cuaderno y un lápiz y me
dejó en la escuela, ya los muchachos habían iniciado desde hace 15 días las
clases y pues ya todos tenían amigos y yo estaba solo, yo pensé que en la
escuela todos iban a pintar, a dibujar, pero no, imagine que todos dibujaban,
pero entonces ese día en un momento determinado, mis compañeros me rodearon
para ver mi cuaderno de dibujos, yo tenía como una serie de historieta y realizaba dibujos de
espadachines, ese día yo entendí que mis dibujos eran diferentes y que el arte
era un poder, yo luego comprendí porque había ocurrido esto; yo había dominado
muchas técnicas como el cuello, los dedos, las manos...cosas que mis compañeros
no habían desarrollado, allí me di cuenta de mi habilidad artística.
Y-M: ¿De dónde viene tu
pasión por el arte?
N: Mi pasión por el arte
viene de la casa, yo vivía con mi madre y con una tía, a pesar de que en esa
época las mujeres no estudiaban, en mi casa éramos muy cultos, leíamos mucho, y
mi tía Cecilia era la pintora de la casa, yo crecí viéndola pintar, ella
realizaba cosas en arcilla, plastilina, y yo pensaba que eso era natural, y eso
a mí me marco como una posibilidad de vivir.
Y-M: ¿Cómo fue tu inicio en
la pintura, los primeros recuerdos que tienes de esta?
N: Yo de pequeño pintaba
todo, en mi casa por obvias razones habían siempre pinturas, recuerdo mucho que
en una ocasión pinte a mi tía Tulia, yo la dibuje con sus gallinas, con su
entorno, con sus cosas, yo tenía 5 años en ese momento, y a ella le gusto y lo
mando enmarcar y el día que ella se dispuso a reclamarlo, me llevo, cuando
entramos a la vidriera, que se llamaba San Luis, ella me miro y le dijo a los empleados "él es el pintor,
el artista" y eso a mí me hizo sentir importante y me marco de por vida.
Cuando ella muere, le botan sus cosas y dentro de una caja estaba mi cuadro, yo
lo recogí y lo tengo en la casa como algo muy preciado, porque esa fue mi
primera obra, ha perdido un poco el color porque tiene algunas partes en esfero
y las tintas no eran muy buenas en aquel entonces.
Y-M: ¿Si no hubieses
escogido ser artista que otra carrera te hubiese gustado llevar?
N: Por la cuestión cultural
de mi época hubiese sido una carrera muy normal, lo cual hubiese sido una
pérdida para la ciudad.
Y-M: ¿Por qué pintas?
N: Pinto porque es de las
mejores excusas para no hacer nada, de hacer lo que quiero, de tener el pelo
largo, entonces el ser artista, el ser pintor, le da a uno, ciertas ventajas
sociales que de otra forma no las podría tener.
Y-M: ¿Cuándo iniciaste tu
carrera recibiste apoyo de alguien?
N: No, a mí me decían que lo
tomara como hobbie, así que me toco pagarme la carrera, mi familia era muy
culta, pero ya en esos momentos caídos en la desgracia, económicamente
hablando, así que yo trabajaba y me pagaba mi estudio, nadie daba un peso por
mí.
Y-M: ¿Qué piensas de la
pintura actual?
N: Hace unos años habían
movimientos, por ejemplo, cuando eran los cismos, cuando eran las vanguardias,
que decían que lo que estaba de moda era el cubismo, el impresionismo, el
puntillismo, eso era lo actual, hoy en día es tan actual una pintura del
maestro Ernesto Cárdenas que es primitivista, como una instalación o un
performance, entonces no se puede hablar de pintura actual, porque no hay, ya
no hay maestros a quien seguir, ya no hay vanguardias.
Y-M: ¿Qué esculturas
recuerdas y por qué?
N: Yo he hecho muchas
esculturas, pero las que más recuerdo son: un Cristo en barro cocido que hice
para la zona alfarera de Sogamoso, técnicamente era muy exigente porque eran
dos metros de envergadura, es decir de lado a lado, en arcilla, una sola pieza,
fue muy complicado hacerlo pero fue un gran reto, yo creo que ya debe de estar
haciendo milagros en este momento. También he realizado muchos bustos, mucho
retrato escultórico, de los cuales recuerdo en especial el del Maestro
Académico por excelencia Eliécer Silva Celis, fundador del museo arqueológico
Suamox, dos años antes de morir estuve con él, ese retrato fue develado en el
octavo encuentro de Academias de Historia en un homenaje que se le realizó,
luego él fallece, pero quedó la satisfacción de que yo le había hecho ese
busto. Otro es el de Carlos Aranguren que se encuentra acá en Duitama y que
también es una buena conmemoración y un buen homenaje a un artista de su talla.
Y-M: ¿El arte para ti tiene
un fin en sí?
N: Sí, el arte tiene un fin,
la diferencia de una persona que es artista a una que no lo es, no es mucha,
porque todos sentimos, todos amamos, a todos nos dá hambre, todos nos
decepcionamos, a todos nos pasa lo mismo, pero el artista tiene la delicadeza o
el detalle de registrarlo, al registrar una situación, un evento, aparece la
obra de arte.
Y-M: ¿Qué carrera
estudiaste?
N: Yo estudie Licenciatura
en Artes Plásticas en la UPTC de Tunja, pero en mi casa me dijeron que no
estudiara eso, sino algo que diera plata,
recuerdo que en el segundo semestre
gane un premio por un afiche del Aguinaldo Boyacense y me dieron un
millón de pesos y en ese tiempo eso era mucha plata, creo que en ese momento la
pintura empieza a ser algo práctico en mi vida y empiezo a vivirla ya como un
oficio.
Y-M: ¿Qué artistas han
influido en tu carrera?
N: Yo siempre he estudiado
mucho los artistas colombianos, he sido un poco regionalista, pero a mí me
impresiona mucho El Bosco porque para su época me parece un "loco",
Dalí me parece insuperable, y de aquí los ebanistas y los académicos como por
ejemplo Gómez Campusano, Roberto Páramo, entre otros.
Y-M: ¿Qué quieres transmitir
con lo que haces?
N: Poesía, lo que esta
genera, emociones, sensaciones, intimidad, esto es lo que quiero transmitir con
mi obra plástica.
Y-M: ¿Cómo describirías tu
arte?
N: Es un arte muy local, muy
cotidiano, de lo que yo vivo y veo diariamente.
Y-M: ¿Qué cualidades
consideras que debe tener un artista?
N: Un artista primero debe
ser una persona sensible a su cultura, debe ser muy inteligente, muy formado,
que le guste la lectura y debe tener una gran disciplina, parece que ser
artista es muy fácil, pero no lo es, porque entonces todos seriamos artistas.
Y-M: ¿Nos puedes contar un
poco acerca de tu proceso en la escultura?
N: Yo tuve la fortuna de ser
alumno de Larusao Páez, es boyacense pero formado en la antigua Unión
Soviética, estudió mucho tiempo escultura monumental, realmente me enseño la
disciplina porque él era una persona muy cumplida y ahí empecé a tomar enserio
el arte y la técnica.
Y-M: ¿Qué otras técnicas
maneja usted?
N: Yo trabajo la cerámica,
es el barro cocido, la instalación, yo fui uno de los primeros instaladores que
tuvo la ciudad.
Y-M: ¿En cuales eventos
artísticos has participado?
N: En Boyacá hay un salón
muy importante que es la ZOCAN,
solamente me la he ganado como ocho veces, el Festival Internacional de
la Cultura tuve la fortuna de ganar en varias oportunidades.
Y-M: ¿Te molestaría
contarnos un poco acerca de tu vida privada?
N: Claro que no, yo soy
casado, tengo cuatro hijos, soy como todas las personas, lucho por mi familia
cada día, trato de hacer las cosas bien y sacar adelante a mis hijos.